Alegría, decepción, frustración y confusión con los resultados de las Oposiciones en Madrid -2023
Las oposiciones a profesores de inglés (y de otras especializades, por supuesto) de secundaria tanto de “Estabilización” como de “Reposición” concluyeron en su totalidad en todas las CCAA en las que se ha celebrado uno de los dos procesos. También el acceso por méritos a nivel nacional
En el caso de Madrid, que ha celebrado este año los dos procesos, como ya mencionamos en el post ¿locura con “excepcionalidad” o excepcional locura?, seguimos todavía sin saber la lista completa de quiénes tienen finalmente plaza o entran en la lista de interinidades y con qué baremación entran.
Vamos a analizar aquí los procesos y los tiempos pensando primero en los opositores, segundo en los miembros de los tribunales y, tercero, en la Consejería de Educación.
1. Los opositores, que en su mayoría se han enfrentado a dos procesos al mismo tiempo
A primera vista disponían en inglés de un total de 434 plazas (357 por el proceso de Reposición y 77 por el proceso de Estabilización), además de las plazas por concurso de Méritos. Veremos qué ocurre con todo esto. De momento hasta la fecha, mucho lío y confusión.
Nerve-racking o un sin vivir
Como Madrid decidió celebrar los dos tipos de oposición al mismo tiempo con la excusa de evitar el “efecto llamada” (aunque en Andalucía, por ejemplo, el tema se hizo el 18 de junio), el 17 de junio se inició el proceso, con escritura del tema de Reposición por la mañana y el de Estabilización por la tarde. En la mayoría de los casos, los candidatos tuvieron que hacer el de Reposición en un Instituto y el de Estabilización en el otro. Luego el Práctico se realizó el 24 de junio para Reposición y el 25 para Estabilización.
Al no ser eliminatorias las partes del examen de Estabilización, los candidatos empezaron a presentar La Unidad Didáctica o Situación de Aprendizaje a partir del 26 de junio, con lo cual el proceso de Estabilización finalizó unos días antes de que salieran las notas de la primera parte del de Reposición. El resultado final del proceso de Estabilización no saldría hasta bastante adentrado el mes de julio.
“Nerve racking” o, si preferís “un sin vivir”, ambas bellas expresiones que describen el buen entrenamiento al que la Consejería de Educación sometió a los candidatos como preparación para lo que habría de venir después.
Así, salen las notas de la primera parte (esta sí eliminatoria) del proceso de Reposición.
Alegría y decepción: Primera parte
Como ocurre cada vez que hay oposiciones, se producen algunas decepciones. Pero esto forma parte del proceso: A veces las diferencias entre tribunales pueden ser una pequeña explicación del resultado. Y esto a pesar de que utilicen rúbricas cada vez más especificadas para decidir las notas.
En otras ocasiones los candidatos creen que han hecho mejor las cosas de lo que, en realidad, han hecho. O no han releído lo que escribieron antes de entregarlo, a pesar de lo mucho que se recalca en los cursos de PoppieS la importancia de releer siempre antes de entregar: calidad por encima de cantidad, os suena, ¿verdad? En cualquier caso, este es un tema sobre el que tendremos que reflexionar los candidatos que han preparado con PoppieS y yo, para ver qué es lo que hay que mejorar.
También hay alegrías, también: por parte de los que han hecho un buen trabajo y se ven recompensados y por parte de aquellos que pensaban que no lo habían hecho tan bien como hubieran podido y habían preparado, pero que lo hicieron lo suficientemente bien como pasar a la segunda parte. En varios casos, con buena nota. Enhorabuena a todos ellos.
Luego viene la revisión, los últimos retoques, los últimos ensayos de la defensa de la programación y las Unidades Didácticas o Situaciones de Aprendizaje. Y llega el momento de la entrega y de la presentación oral.
Alegría y decepción: Segunda parte
Y se vuelven a producir alegrías y decepciones cuando salen primero las notas de Reposición y, después, las de Estabilización. Alegrías porque en muchas ocasiones la impresión, que fue muy positiva, muestra excelentes resultados. En algunos casos, tanto en Estabilización como en Reposición. En otros, bien en Reposición o en Estabilización. Volvemos a felicitar públicamente a todos los que han aprobado la fase de Oposición, cualquiera que sea.
Y decepciones porque, aunque la impresión es positiva los resultados no son los esperados: a pesar de que, en algún caso, se tuvo la suerte de que cayera la misma Unidad Didáctica/Situación de Aprendizaje que la que se eligió para presentar en Estabilización, se aprobó Estabilización con buena nota y se suspendió Reposición. En otros casos, probablemente, porque nos ponemos nerviosos y no damos todo lo que podemos. O no demostramos tener la seguridad requerida. O nos hemos olvidado de algo importante. O cualquier otra razón, sobre la que también tendremos que reflexionar y mejorar.
En cualquier caso, hasta aquí, todo normal en estos procesos, ya que hablamos de los candidatos que han superado la fase de Oposición, bien sea de Reposición, de Estabilización, o de ambas. Esta fase depende de los tribunales que puntúan la actuación de los candidatos.
2. Los miembros de los tribunales
Para los miembros de los tribunales ha sido también, sin duda, un proceso largo y agotador que empezó, como para los candidatos, cuando el curso académico aún no había terminado.
Para unos pocos el proceso como miembros de tribunales es ya conocido porque no es el primero en el que participan. Pero al celebrarse este año dos procesos a la vez, han sido muchos los que, bien voluntaria bien forzosamente, han experimentado la fase de Oposición desde el lado del examinador. Como me ha comentado más de uno, cuando se es miembro de un tribunal uno se da cuenta de lo importante que es que el candidato revise y relea lo que escribe antes de entregarlo, además de pensar en cómo se va a expresar lo que se quiere decir con claridad, brevedad y relevancia. Pensar por sí mismo más que memorizar.
Entiendo que los candidatos que no han superado la fase de Oposición piensen que los tribunales son injustos o caprichosos. Especialmente los que han superado un proceso, pero no el otro, a veces, como ya he comentado, presentando la misma unidad didáctica en ambos y aprobando con holgura tanto el tema como el práctico. Sin embargo, me consta que no son ni lo uno ni lo otro: los miembros de los tribunales son grandes profesionales que conocen el día a día de las aulas, que recuerdan muy bien lo que es ser candidato y que quieren hacer el trabajo que se les ha encomendado, como siempre, con profesionalidad. Aunque siempre haya algunas excepciones, desde luego.
3. La Consejería de Educación de Madrid
A la Consejería de Educación parece importarle un comino tanto la Educación Pública en la Comunidad Autónoma que administran como los profesionales que imparten enseñanza en la Educación Pública y los que aspiran a formar parte de ella. A fecha de hoy aún no sabemos el número total de candidatos que tienen plaza en Estabilización por la forma en que la Consejería ha mal-administrado el proceso.
Como diría Vernon Nash, “they can’t even organise a piss-up in a brewery”. Sí parecen muy capaces, no obstante, de causar confusión y frustración. Me explico.
Se empeñaron en realizar dos procesos en el mismo año, con la complejidad que ello conlleva. Complejidad que, como era previsible, se ha visto incrementada porque este año se ha realizado, además, el Concurso de Méritos a nivel nacional para reducir los puestos de interinidad.
Ofrecieron 77 plazas de Estabilización en inglés que tienen, por ley y compromiso con los sindicatos, que cubrir, ya que son las que se ofrecen de forma especial para reducir los puestos de Interinidad.
En lugar de cubrir estas plazas primero, que podría haber sido una opción, deciden que se cubren primero las de Reposición, alegando que habían sido convocadas antes. En ese caso, podrían haber realizado el proceso de Estabilización con fecha posterior o, incluso, en 2024, como se ha hecho en otras CCAA.
Sacan las puntuaciones del concurso-oposición con las plazas que se cubren el 26 de julio para Reposición y para Estabilización. Pero hay candidatos que están en las dos listas. Algunos puede que estén también en la del Concurso de Méritos.
El 28 de julio, haciendo referencia a la Resolución del 18 de julio , se publica la apertura del plazo de presentación de selección de Procedimiento del 27 al 31 de julio. Entendíamos, por tanto, que una vez se eligiera el Procedimiento, y a partir del 1 de agosto, se ampliaría la lista de candidatos con plaza (tanto en Reposición si procede, como en Estabilización), cuya baremación (fase de oposición + fase concurso) fuera inmediatamente inferior a la última incluida en dicha lista hasta completar las 77 plazas que se han ofertado para Estabilización y las 354 de Reposición.
Hay en torno a 30 candidatos que están en las dos listas. Por tanto, no se necesitan grandes luces para calcular que, si el número 1 de la lista de Estabilización tenía una puntuación de 7,8662 y el número 76 de 6,2660 (el 77 está asignado a Reserva y la puntuación es menor), los candidatos con puntuación inferior a 6,2660 y superior a 5,0000 tienen derecho a la plaza ofertada de Estabilización hasta completar las 77 plazas. Lo mismo en Reposición, en donde la puntuación oscila entre 8,9333 y 5,1647.
El 1 de agosto se publica la tan ansiada lista. Una única lista con todos: Expectativa de destino provisionales (es decir: quienes sacaron plaza en 2021, imagino, ya que identifico a alumnos que sacaron plaza entonces); Reingresados sin reserva; y ¡por fin! Aprobados en Prácticas. Miramos la lista. Identificamos a los que han sacado plaza y que ya sabíamos: ¡¡¡ ENHORABUENA!!!, ¡¡¡cómo me alegro por vosotros!!! … Algunos se sienten confusos porque no les parece que la posición que ocupan sea la adecuada… Los que aprobaron sin plaza consultan también la lista para ver si ahora sí, están ahí. Pero ¡oh frustración y confusión! No, no están…Y se comprueba que en lugar de haber 354 de Reposición + 77 de Estabilización, que serían un total de 431 plazas…sólo hay ¡395! ¿Cómo es posible?
Para completar el desaguisado, la baremación de los candidatos que se quedan en listas de interinidad no se ha hecho mal, sino garrafalmente mal. Tanto es así, que las listas a día de hoy han desaparecido. Y no sabemos nada más de las otras listas, pues ahora mismo sólo encontramos esta nota
No se podría haber explicado mejor. Ha sido un proceso largo y muy duro, lleno de dudas e incertidumbres que la administración en ningún caso ha sabido resolver.
Confiemos en que se resuelva pronto y se acabe así con la incertidumbre que están sufriendo los candidatos que están pendientes de un hilo.